CIEGOS, SORDOS Y MUDOS: O de la pasividad de la administración Balear

El pasado 15 de julio el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Illes Balears – CODNIB depositó en el registro de la Conselleria de Salud, la Dirección General de salud Pública y la Secretaría Autonómica de Educación, Cultura y Universidades, una batería de recomendaciones para atajar el riesgo de inseguridad nutricional detectada en los comedores escolares de Baleares.

El Diario de Mallorca lanzó la notica a toda página el 17 de julio, y la agencia de noticias Europa Press se hizo eco del comunicado de prensa del CODNIB el mismo día, llegando a otros medios como La Vanguardia, El Mundo y el diario digital 20 Minutos, entre muchos otros.

Sin embargo, parece que la estrategia Balear copia, la ya manida costumbre a la que nos vemos abocados: cerrar los ojos, oídos y boca para intentar alejar los temas que preocupan a una gran parte de nuestra sociedad, es decir: cerrar  los ojos a la evidencia, no oír a los interlocutores necesarios y dar la callada por respuesta; de este modo la Conselleria de Salud del Gobierno de Balares, parece que da carpetazo al riesgo de inseguridad nutricional detectada en los comedores escolares por el CODNIB.

El informe elaborado por el Colegio evalúa 38 menús escolares que representa el 22% de los centros escolares de Baleares,  pone en evidencia que sólo 1 de cada 10 menús cumple con la normativa específica de Baleares.  

¿Creían acaso que la entrada en vigor de la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutrición, iba a solucionar el problema harto repetido, de menús desequilibrados y alejados de la alimentación saludable para los niños de nuestra Comunidad? NADA MÁS LEJOS DE LA REALIDAD:

• El 40% de los menús carecen de cualquier tipo de supervisión.
• Más de 50% no cumplen la frecuencia recomendada para frutas y hortalizas, no promociona la presencia de alimentos integrales, ni de legumbres ni de los pescados, y además abusan de los precocinados.
• El 45% incluye más preparaciones cárnicas grasas de las permitidas en la normativa.
• El 32% abusa de las frituras, el 36% prefiere incluir esta técnica culinaria para servir los pescados, el 37% incluye una guarnición frita junto a un alimento rico en grasa y el mayor despropósito: casi 1 de cada 3 hacen coincidir dos preparaciones fritas en el mismo día.

Ante esta situación, el CODNIB ha alertado del compromiso de la seguridad nutricional en grupos vulnerables como la infancia, que a su vez se ve agravada por el actual contexto de crisis. Existen evidencias que relacionan a los grupos de población de menor poder adquisitivo, con el incremento del riesgo de padecer malnutrición  y enfermedades crónicas.

Por otra parte, y lejos entender esta situación de irregularidad desapercibida (nos inquietaría saber que es consentida), el CODNIB también ha querido valorar cómo afecta a los resultados, el hecho de que el menú escolar esté supervisado por dietistas-nutricionistas. Algunos podrían pensar que esta es una información marcada por el conflicto de intereses, pero la evidencia muestra diferencias significativas, de modo que es más probable encontrar alimentos integrales, recomendaciones para las cenas, información detallada para ensaladas y promoción de pescados, cuando el menú está supervisado por dietistas-nutricionistas. Por el contrario, en estos casos en menos probable encontrar exceso de preparaciones grasas, precocinados, frituras y predominio de pescados fritos.

Por eso, el CODNIB ha recomendado:

• A los centros escolares: tomar conciencia de su relevante papel para cumplir y hacer cumplir la normativa y exigir, con base a la evidencia,  que el menú esté supervisado por un dietista-nutricionista colegiado.
• A las autoridades sanitarias y educativas:

1. tomar conciencia de su relevante papel para asegurar la seguridad nutricional en la infancia, prestando especial atención a la población con menos
2. asegurar la supervisión de menús en el sentido más amplio del término, y apoyar, con base a la evidencia, que esta tarea recaiga en dietistas-nutricionistas colegiados.
3. realizar campañas de inspección e información, dando plazos a empresas y/o colegios para su puesta al día en normativa de comedores escolares.
4. contar con colaboración activa y pro-activa del CODNIB para garantizar la seguridad nutricional de los niños y facilitar a sus familias y a los centros escolares las herramientas para la estructuración de hábitos alimentarios saludables a través de la educación alimentaria e información al consumidor.

Las organizaciones de padres y madres de alumnos de Baleares ya ha compartido con el CODNIB su preocupación ante esta situación y tomarán las medidas necesarias para exigir el cumplimiento de las normas que garanticen la seguridad nutricional en centros escolares y de 0 a 3 años.

Por su parte, y a 30 de julio,  los Organismos Competentes de Baleares en comedores escolares, no han mostrado al CODNIB ninguna reacción a la propuesta presentada hace ya 15 días.  

Como las “cosas de palacio, van despacio”, seguiremos esperando a que se tomen las medidas necesarias, y hasta entonces vigilaremos las consecuencias que el incumplimiento de la Ley pueda ocasionar en la seguridad nutricional de los ciudadanos de Baleares. 

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